Un paro de seis horas en las ventas de combustibles en todas
las estaciones de la región este afiliadas a la Asociación Nacional de
Detallistas de Gasolinas (Anadegas) inició este martes a las 6:00 de la mañana,
para exigir del Gobierno que elimine la mafia que aseguran existe en el
comercio de los carburantes.
El presidente de Anadegas, Anulfo Rivas, dijo que la
protesta la respaldan 95 estaciones de combustibles de las provincias San Pedro
de Macorís, La Romana, La Altagracia, El Seibo y Hato Mayor, actividad que se
extenderá el día 25 hacia la región sur de 6:00 a 12:00 del mediodía.
“Nuestra lucha es para que se sincericen los precios de los
combustibles y que el Ministerio de Industria y Comercio enfrente la mafia, y
aplique las bajas que se correspondan, pues la semana pasada los carburantes
bajaron $7.00 cuando el precio debió bajar 10.50 pesos. Eso también ocurrió en
las semanas anteriores”, subrayó el presidente de Anadegas.
“Todos los detallistas de la región este, miembros de
Anadegas hemos hecho un cese hoy en las operaciones y en reflexión acudimos con
nuestros empleados en autobuses a la Basílica de Higüey, donde a las 8:00 de la
mañana participamos en la homilía y entregamos al obispo de la diócesis un
documento para empoderar a la Iglesia del desastre que existe en la
comercialización de los combustibles”, expuso Rivas.
El dirigente de Anadegas adujo que debido a la mafia que
existe en los combustibles, que es apañada por funcionarios del Gobierno, que
lleva a que la población en general pague los combustibles más caros de
Latinoamérica.
Precisó que el paro forma parte del cronograma de acciones
dinámicas programadas por Anadegas, y que tras la jornada en la región Sur, la
protesta se extenderá a la Línea Noroeste, después en el Gran Santo Domingo, y
culminará con una asamblea nacional que tomará las decisiones finales de un
paro nacional.
Señaló Rivas que Anadegas contempla además visitar las
iglesias, las embajadas y los directores de medios de comunicación, para
entregarles los documentos que avalan la mafia en los combustibles, donde hay
funcionarios del Gobierno involucrados.
El Nacional