SANTO DOMINGO.-El vicepresidente ejecutivo de la Corporación
Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Rubén Jiménez Bichara,
informó este jueves que a partir del próximo año, con la entrada al sistema de
la Central Termoeléctrica Punta Catalina y de nuevos proyectos de energía
renovable, se reducirá a la mitad la dependencia del petróleo como combustible
base de la generación eléctrica nacional.
El funcionario dijo que la inversión realizada por el
Gobierno en Punta Catalina ha ido de la mano con las facilidades que el Estado
ofrece al sector privado para invertir en proyectos de generación eólica y
solar, con lo que entre 2012 y 2020 habrán entrado al sistema por lo menos
1,386 megavatios nuevos.
“Esta energía no dependiente del fuel oil como derivado del
petróleo proviene de los 752 megavatios que aportará Punta Catalina, a los que
se agregan 520 megavatios de energía renovable, 114 del ciclo combinado de las
plantas de Los Mina de AES Dominicana y al menos 35 nuevas centrales
hidroeléctricas y microhidroeléctricas que desarrolla el Estado”, expresó
Jiménez Bichara.
Dijo que a esos nuevos proyectos de generación se agregará
una licitación para contratar 500 megavatios nuevos con la meta de que la
capacidad instalada sea mayormente con base en gas natural, energía renovable y
carbón mineral, de forma que el combustible derivado del petróleo se reduzca de
un 50% actual a un 22% hacia el 2023.
Logros
El titular de la CDEEE presentó estos datos durante la conferencia
“Plan Estratégico: Logros y Metas del Sector Eléctrico Nacional” que ofreció en
el II Foro de Energía Sostenible que se realizó en el hotel Jaragua de esta
capital.
Expresó que en los últimos seis años, la CDEEE se ha
concentrado en corregir males que se tornaban permanentes en el sector
eléctrico como la negociación para reducir y mantener controlada la deuda con
los generadores privados desde mediados del año 2015.
Asimismo, la CDEEE realizó por primera vez un proceso de
licitación pública para la contratación de energía, tal como lo establece la
Ley General de Electricidad 125-01 y se han captado financiamientos de
organismos internacionales por US$368 millones que son invertidos en los
programas de rehabilitación de redes de las empresas distribuidoras de
electricidad (EDE).
Gracias a esos programas de rehabilitación de redes se ha
logrado aumentar la cantidad de circuitos con 24 horas de electricidad y las
pérdidas han bajado de 35% a un 28.6% en los últimos seis años.
Metas
Jiménez Bichara reconoció que lo alcanzado hasta ahora no es
suficiente, pues es necesario reducir los costos de generación mediante la
incorporación al sistema de energía no dependiente del petróleo como
combustible, ya que ese producto está en aumento constante.
Explicó que cada año la demanda de energía crece en una
proporción de 100 megavatios adicionales, por lo que se requieren inversiones
constantes en nueva generación no solo para sustituir las unidades que producen
con fuel oil como derivado del petróleo, sino también para abastecer por
completo a un país donde cada vez se consume más energía.
De forma sostenible y con el cuidado de impactar lo menos
posible en el medio ambiente, la CDEEE ha garantizado los contratos para el
desarrollo de por lo menos 12 nuevos proyectos de generación de energía
renovable con base en sol, aire y biomasa, que aportarán en conjunto 411
megavatios que se sumarán a los 109 inaugurados hasta el 2016.
En forma adicional, el Gobierno está pendiente de que AES
Dominicana construya un gasoducto que irá desde su terminal de Andrés hacia San
Pedro de Macorís, con lo que se dará la posibilidad de que plantas que operan
con fuel oil y acumulan una capacidad conjunta de 940 megavatios, puedan
convertirse a gas natural y reducir así sus costos y precios de venta de
energía.
Jiménez Bichara dijo que la CDEEE también prepara los
términos de referencia para una licitación pública internacional que procura
contratar a inversionistas privados para la construcción de al menos 500 nuevos
megavatios con base en gas natural.
“Como pueden apreciar, nuestros ejes de acción en procura de
resolver el problema eléctrico no solo se enfocan en la construcción de Punta
Catalina, que representará un importante aporte de 752 megavatios brutos con
base en carbón mineral, sino que también procuramos energía renovable,
conversión de plantas existentes a gas natural y construcción de nuevas plantas
para abastecer la demanda creciente del sistema”, manifestó Jiménez Bichara.
Punta Catalina
Jiménez Bichara ofreció detalles sobre los componentes e
inversión realizada hasta ahora en la Central Termoeléctrica Punta Catalina que
se construye en la provincia Peravia y estará en funcionamiento pleno durante
los dos primeros trimestres del próximo año.
Dijo que para reducir su impacto en el medio ambiente Punta
Catalina cuenta con un sistema de control de emisiones de gases, que no tienen
otras plantas similares en el país ni en la región. También tiene un sistema de
rompeolas que protege a las especies marinas cuando se absorbe el agua de mar
que sirve de enfriamiento a la planta.
Un almacén de carbón completamente techado, con correas de
conducción cerradas, evitarán emisiones de polvillo en el ambiente, además de
que los desechos de ese combustible serán debidamente tratados cumpliendo con
las normativas ambientales nacionales e internacionales.
El vicepresidente ejecutivo de la CDEEE explicó que esos
componentes de protección del medio ambiente en Punta Catalina también
impactaron en parte de la inversión que se realiza para su construcción.
Explicó que hasta ahora la inversión en Punta Catalina por
hitos entregados asciende a US$2,117 millones. De esa cantidad se han invertido
US$291 millones provenientes del financiamiento europeo de SACE, US$595
millones de los bonos soberanos y US$1,231 millones de recursos propios del
Estado.
El funcionario defendió la decisión del Gobierno de crear un
fondo de contingencia de US$336 millones para garantizar la terminación de la
obra y condicionar su devolución o entrega definitiva en la sentencia que dicte
el tribunal de arbitraje internacional donde el Estado defenderá la posición de
no pagar más de US$1,945 millones como valor contractual de la obra.
Dijo que la CDEEE contrató a la firma de abogados Foley Hoag
LLP para defender los intereses del Estado y enfrentar el reclamo de US$708
millones adicionales que hace el Consorcio Odebrecht-Tecnimont-Estrella.
El Dia