“Catalina es una planta “subcrítica” con un nivel de
eficiencia neta de 36.5%, en el rango de las “supercríticas””, continúa Andy.
Esta es una vinculación de las dos tecnologías para referirse a la emisión de
CO2, la cual consideramos innecesaria, ya que se puede encontrar en algunas
publicaciones que las subcríticas tienen eficiencia entre 32–38%, y la
supercrítica entre 38-42%, con lo cual se puede decir que Punta Catalina no es
tan eficiente dentro de las mismas subcríticas. Además, se pueden encontrar que
por cada punto de eficiencia en tecnología se disminuye en 3% o 2% las
emisiones CO2. De manera que como P. Catalina tiene una eficiencia de 36.5%,
entonces 38-36.5 = 1.5%; lo que quiere decir entonces, si es así, que Punta
Catalina, dentro de las subcríticas, emitiría 783.5 gramos de CO2 por KWh, y
no los 788 gramos de CO2 por KWh, si
fuera más eficiente; y sin tener que entrar al “rango de las supercríticas”,
ciclo combinado o cualesquiera. ¿y qué se resuelve? Pero lo cierto es que mientras
más alta la eficiencia, habrá menos emisión por Kwh. MWh o GWh; por lo tanto, a
más alta eficiencia con combustibles fósiles o renovales, con base de carbono
(C), menos emisión de CO2. De manera, que hablar de “en el rango de las
“supercríticas””, es traer confusión, no importa de donde venga.
A continuación veremos cómo se compara la generación de
energía con carbón en EUA y RD, pero sin relacionar el tema con la emisión de
CO2, que sí es relevante. Veamos, “en el 2040 cerca del 26% de la generación de
electricidad en EUA sería provista por plantas de carbón, el doble de lo que se
generará con carbón (13.3%) este año en República Dominicana”. Fíjese,
Dominicana en 2016 y EE UU en 2040. Pero, es bueno notar, según sus datos, que
en el 2016 Estados Unidos tenía 29.9% de generación con carbón y Dominicana
13.3%. Entonces, podemos decir que en 2040, 24 años después, EUA tendrá 26% y
RD, cuando entre Punta Catalina, y sumados Itabo y Barahona Carbón, subirá no a 18% en solamente 3 o 4 años sino
a más o menos el 50%.
Pero la reducción de la emisión de CO2 es más relevante que
comparar caldera subcrítica con supercrítica o la comparación de los
porcentajes de generación con carbón de RD y EUA, ya que el compromiso del
país, RD, es reducir los 36 millones de TM de CO2 en un 25% para el 2030. Por eso,
con la información dada en dichos artículos, calculamos que Punta Catalina
generará 4.19 millones de TM anualmente, lo cual representa un aumento de 11.6%
en 4 años, ya que la emisión subirá de 36 a 40.2 Millones de TM de CO2. No se
puede ocultar, así como no tiene sentido comparar los porcentajes de generación
a carbón de “estas dos potencias energéticas”.
Veamos otras afirmaciones para justificar por qué el
Gobierno no optó por plantas supercríticas. Y fue ”porque las unidades
supercríticas o ultra supercríticas se construyen con una capacidad sobre los
400 MW y el sistema de transmisión existente en nuestro país no permite la
conexión de unidades superiores a 350 MW.” No es necesario desmentir sino
afirmar que hay plantas supercríticas por debajo de 350Mw, con lo cual queda
solucionados el límite inferior de 400Mw y, consecuentemente, la limitación de
que “el sistema de transmisión existente en nuestro país no permite la conexión
de unidades superiores a 350 MW”. Por
eso, dice Andy, “Si hubiésemos elegido unidades supercríticas o ultra
supercríticas, habríamos botado dinero pues necesariamente tendrían que operar
por debajo de su capacidad”. Estas afirmaciones son limitaciones ficticias, las
cuales se analizan como si el sistema eléctrico fuera fijo y rígido, por lo
cual no se puede modificar ni desarrollar, entonces, no hay opción;
solamente hay que adaptarse a las
condiciones existentes, ¿dónde queda la ingeniería? Es oportuno señalar que las
limitaciones de capacidad de línea de transmisión se presentan continuamente y
continuamente se resuelven. Aunque habló de botar el dinero, luego se informó y
refirió que como hay que sacar la energía de la central se están construyendo
las infraestructuras necesarias, y hasta da nombres específicos,” como la Línea
345 kV desde Catalina hasta la subestación Julio Sauri”, y otras…
En cuanto al tamaño, se debe tomar en cuenta que la potencia
de la unidad a instalar no sea superior a la reserva del si+6stema, ya que
podría provocar, bajo ciertas condiciones, un apagón general frente a un
disparo o salida brusca de esa unidad, o provocar apagones en caso de
mantenimientos programados. Sencillamente, el criterio de elección fue que la
tecnología subcrítica era más confiable y probada que la supercrítica, y no el
tamaño. Entonces fue una decisión. No
mezclar esos atajos con supercrítica, es
conveniente en aras de la transparencia. Así, no se hubiera llegado a decir
“cosas insostenibles” como que “Si hubiésemos elegido unidades supercríticas o
ultra supercríticas, habríamos botado dinero pues necesariamente tendrían que
operar por debajo de su capacidad.” Las limitaciones ficticias son ubicuas en
todas las ramas de las ciencias y nos afectan a todos.
Volveremos con el costo de Punta Catalina.
El Dia – Dominguez Rodriguez Tatis