miércoles, 18 de septiembre de 2019

Arabia Saudita promete pruebas concretas que vinculan a Irán con ataque a industria petrolera



YIDA/NUEVA YORK, 18 sep (Reuters) - Arabia Saudita dijo que el miércoles mostrará pruebas que vinculan a su rival regional Irán con un ataque sin precedentes a su industria petrolera y que Washington cree que se originó en Teherán, en una peligrosa escalada de las fricciones en Oriente Medio.

Una imagen de satélite del gobierno de Estados Unidos muestra los daños a la infraestructura de petróleo y gas de Saudi Aramco en Abqaiq, Arabia Saudita. Gobierno de EEUU/DigitalGlobe/Handout vía REUTERS. ESTA IMAGEN HA SIDO ENTREGADA POR UN TERCERO.

Pero Teherán ha negado de nuevo su participación en los ataques del 14 de septiembre contra instalaciones petroleras, incluyendo la mayor planta de procesamiento de crudo del mundo, que inicialmente eliminó la mitad de la producción de Arabia Saudita.

“Quieren imponer la máxima (...) presión sobre Irán mediante calumnias”, dijo el presidente iraní Hassan Rouhani. “No queremos conflictos en la región... ¿Quién empezó el conflicto?”, dijo, culpando a Washington y sus aliados en el Golfo de la guerra en Yemen.

El grupo yemení Houthi, aliado de Irán que lleva más de cuatro años luchando contra una coalición encabezada por los saudíes que cuenta con el respaldo de Occidente, ha reivindicado la responsabilidad y dijo que usaron drones para atacar las instalaciones de la petrolera estatal Aramco.

No obstante, el ministro de defensa saudí dijo que celebrará una conferencia de prensa el miércoles a las 14:30 GMT para presentar “pruebas materiales y armas iraníes que demuestren la implicación del régimen iraní en el atentado terrorista”. Riad ya ha dicho que los resultados preliminares muestran que el ataque no provino de Yemen.

Si se hacen públicas pruebas concretas que muestren la responsabilidad iraní, podría presionar a Riad y Washington para que respondan, aunque ambos países han hecho un llamamiento a la calma.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio que no quiere una guerra y que no hay “prisa” por responder al ataque, y que se está coordinando con países europeos y del Golfo Pérsico.

El príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman, dijo el miércoles, en una llamada al líder de Corea del Sur, que el ataque era una “ auténtica prueba de la voluntad global “ de hacer frente a la subversión de la estabilidad internacional, informaron los medios de comunicación estatales.

Su enviado a Londres, el príncipe Khalid bin Bander, dijo a la BBC que el ataque fue “casi con toda seguridad” respaldado por los iraníes, pero..: “Estamos tratando de no reaccionar demasiado rápido porque lo último que necesitamos es más conflicto en la región”.

“EVIDENCIAS CONVINCENTES”

El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, y responsables de Naciones Unidas que supervisan las sanciones a Irán estaban viajando a Arabia Saudí para conversaciones e investigaciones.

Un alto funcionario estadounidense dijo a Reuters que los ataques se originaron en el suroeste de Irán. Tres responsables dijeron que se trataba de misiles de crucero y drones, lo que indica un mayor grado de complejidad y sofisticación de lo que se pensaba inicialmente.

Los responsables no proporcionaron pruebas ni explicaron qué informaciones de Estados Unidos estaban utilizando para las evaluaciones.

Arabia Saudí, el mayor exportador de petróleo del mundo, dijo el martes que los 5,7 millones de barriles por día de producción se restablecerán completamente a finales de mes.

Los precios del petróleo cayeron después de las garantías saudíes, tras haber subido más de un 20% en un momento dado el lunes - el mayor salto intradiario desde la Guerra del Golfo de 1990-1991.

Un alto cargo de Estados Unidos pidió una respuesta del Consejo de Seguridad de la ONU sobre los ataques, aunque es poco probable que tenga éxito porque los diplomáticos dicen que Rusia y China -que tienen poder de veto- probablemente protejan a Irán.

Uno de los tres responsable estadounidenses expresó su confianza en que la investigación saudí arrojaría “pruebas forenses convincentes” que determinaran los orígenes del ataque que ha dejado al descubierto graves brechas en las defensas aéreas saudíes a pesar de los miles de millones de dólares gastados en armamento militar occidental.

“El ataque es como un 11 de septiembre para Arabia Saudí, es un punto de inflexión”, dijo un analista de seguridad saudí.

CONFLICTO IRAN-EEUU

Los ya deshilachados lazos entre Estados Unidos e Irán se deterioraron aún más cuando Trump renunció al pacto nuclear y volvió a imponer sanciones, lo que perjudicó gravemente a la economía iraní.

El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, descartó las conversaciones con Estados Unidos a menos que vuelva al acuerdo nuclear entre Irán y Occidente que Washington renunció el año pasado.

Washington y sus aliados del Golfo también quieren que Irán deje de apoyar a los representantes regionales, incluyendo Yemen, Irak y Líbano.

A pesar de años de ataques aéreos contra ellos, el movimiento Houthi se jacta de tener drones y misiles capaces de llegar hasta lo más profundo de Arabia Saudí, el resultado de una carrera armamentista desde que la coalición musulmana suní, respaldada por Occidente, intervino en Yemen contra el grupo en marzo de 2015.

Los gobernantes clericales de Irán apoyan a los Houthis, pero Teherán niega que los apoye activamente con ayuda militar y financiera. En el vídeo del miércoles, difundido por los medios de comunicación iraníes, Rouhani dijo que el ataque con petróleo fue una “advertencia” de los yemeníes.