El desarrollo y democratización de las tecnologías de la
información y comunicación (TIC) han propiciado la aparición de la economía
colaborativa, caracterizada por iniciativas que aprovechan vacíos no suplidos
por empresas tradicionales, aprovechan las sinergias de personas que persiguen
un mismo fin y, además, tienen un impacto social significativo.
Aportan mayor eficiencia a los mercados, pues facilitan la
diseminación de las informaciones, de manera que dificulta que algunos agentes
se aprovechen de información privilegiada.
Los ejemplos más comunes de este tipo de emprendimiento son
las páginas o aplicaciones que permiten anunciar la compra o venta de bienes
muy diversos, o las aplicaciones de transporte que ponen en contacto a
individuos que se dirigen hacia el mismo lugar, haciendo que el viaje sea más
eficiente para ambos en término de costo y tiempo.
Un ejemplo que se repite con mucha frecuencia es la
aplicación de la colaboración a la hora de alquilar, demandando y ofreciendo de
forma virtual. También están los mercados de ideas (como formación, asesoría,
entre otros).
economia colaborativa america latina
Ricardo Pérez Garrido, coach de innovación, asegura que la
economía colaborativa permite obtener ingresos “donde antes no los había,
gracias a bienes, conocimiento y servicios que antes era posible movilizar más
allá de una economía informal y próxima”.
Pérez Garrido participó en la elaboración del informe
Economía Colaborativa en América Latina del IE Business School, el Banco
Interamericano de Desarrollo (BID), el Fondo Multilateral de Inversiones
(Fomin) y el Ministerio de Economía y Competitividad de España.
“Su potencial para movilizar empleo y riqueza utilizando
recursos infrautilizados, su componente social y de comunidad, incluso, su
visión de consumo más honesto y controlado, le hace encajar en una sociedad que
cada vez más se preocupa por esos temas”, agrega el experto.
Se trata de iniciativas relativamente nuevas, especialmente
en América Latina, cuyo pico de ascenso se ha producido desde 2010. En República
Dominicana se han creado cerca del 2% de estas iniciativas que buscan aportar
eficiencia al uso de los recursos mediante vías creativas.
El informe revela que Brasil, México, Argentina y Perú
lideran en cuanto a número de iniciativas de Economía Colaborativa,
concentrando el 69%. La gran mayoría de las iniciativas surgieron en los
últimos 5 años. Por otro lado, el informe agrega que los tipos de sectores
predominantes en las actividades de esta economía sugieren una realidad donde
los principales compradores son empresas que buscan acceso a servicios y
espacio, por un lado, y particulares buscando eficiencia en transporte y
alojamiento.
“Estas plataformas de intermediación son las más sencillas
de organizar, por su naturaleza ya conocida, con servicios sustitutivos
claramente organizados”, agrega el informe.
Otras formas de economía colaborativa son formación
académica o intercambio, bancos de trabajo y monedas alternativas. En América
Latina todavía les falta madurez, especialmente de parte de los posibles
usuarios que tienen que familiarizarse y habituarse.
iniciativas de economia colaborativa
El 64% de las iniciativas de economía colaborativa tienen 10
o menos participantes o empleados.
El 64% de las iniciativas tienen 10 o menos participantes o
empleados. Se trata de organizaciones pequeñas, cercanas al autoempleo y,
gracias a que tienen ánimo de lucro, tienen impacto en los ingresos de los
participantes.
Mediano y largo plazo
A la hora de hablar de retos, el informe de Economía
Colaborativa destaca que estas iniciativas no tienen problema a la hora de
acceder a la tecnología o a la protección legal. La barrera más grande es
llegar a crear la confianza de parte de la población en estos nuevos modelos.
Según el informe, el papel de las instituciones debería ser
el de dar respaldo comunicando y promoviendo los beneficios y casos de éxito.
“Cuando les hemos preguntado directamente qué demandan, su
respuesta es mayoritaria: no hace falta más tecnología, ni más acceso; quizás
más financiación, pero sobre todo apoyo a la difusión del tipo de modelos que
se proponen”, expresa el informe.
La mayoría de los emprendedores de iniciativas colaborativas
entiende que el mercado crecerá muy ligado a propuestas locales, especialmente
con la entrada de iniciativas similares internacionales, puesto que
despertarían mayor confianza de parte de los usuarios, al considerar que tienen
un aval global.
“Las empresas que entren pronto en el mercado puedan crear
barreras de entrada para otros”.
El Dinero.com.do