El sector público mantiene una mayor participación porcentual que la parte privada en el ramo energético de República Dominicana, lo que se fortaleció mucho más con la entrada de la Central Termoeléctrica Punta Catalina (CTPC) al Sistema Eléctrico Nacional Interconectado (SENI) en 2020.
En términos estructurales, por muchos años, el sector eléctrico no tuvo modificaciones demasiado importantes en cuanto a la conformación de la inversión público-privada, hasta la entrada de la CTPC, ubicada en la provincia Peravia, donde la intervención es puramente pública.
La propiedad estatal o pública en el sector eléctrico está conformada más o menos de esta forma: La Central Termoeléctrica es 100 % estatal; la Empresa de Transmisión Dominicana (ETED) es 100 % del Estado, EGE- Haina es empresa mixta (50 % público- 50 % privada), las empresas distribuidoras de electricidad del Norte (Edenorte), del Este (Edeeste) y del Sur (Edesur) son en totalidad del Estado y lo propio ocurre con la Empresa Hidroeléctrica (EGEHID), que es estatal en un 100 %. En EGE-Itabo el Estado tiene 49.7 %.
Punta Catalina, que costó 2,454 millones de dólares y que fue inaugurada en julio de 2020, para entonces ya tenía un valor en el mercado de 2,600 millones de dólares, según se informó de manera oficial. Las dos unidades de Punta Catalina tienen una capacidad de generación de 756 mevagatios brutos constantes. En el caso de la Empresa de Generación Eléctrica EGE-Itabo, es una filial de la Corporación AES, que posee el 50 % de participación accionaria como socio privado mayoritario. Otro 49.97 % es propiedad del Estado dominicano, representado por el Fondo Patrimonial de las Empresas Reformadas (Fonper), y el restante 0.03 % está en manos de exempleados de la antigua Corporación Dominicana de Electricidad (actual Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales–CDEEE-).
Si se parte de lo que tiene el Estado en cada caso citado antes, la participación del ramo privado en el ámbito energético es: EGE-Haina es en 50 % privada, EGE-Itabo es en un 50 % privada y el resto (más allá del 49.7 % que tiene el sector público) es de antiguos empleados de la CDE, tal como se indicaba más arriba.
Hace varios años, según se había calculado desde la Asociación Dominicana de la Industria Eléctrica (ADIE), del parque de generación existente para entonces 67 % de la capacidad instalada era de capital privado en un 100 %. Pero luego de eso, con la puesta en operación de la Central Termoeléctrica Punta Catalina, entonces el Estado pasó a superar la parte privada en materia de participación porcentual.
Entran 75 de cada cien pesos
De cada 100 pesos que EGE-Haina genera de utilidades, 75 pesos pasan al Estado en dividendos e impuestos.
En la ecuación aritmética del negocio “Estado-sector privado”, que fue un ejemplo de alianzas público-privadas (APP), incluso antes que existiera la Ley de Alianzas Público-Privadas, ha quedado claro que si las empresas de las que el Estado es socio obtienen buenos beneficios, el Estado dominicano obtiene la mayor parte de los mismos. En EGE-Itabo y EGE- Haina, el Estado tiene participación accionaria importante, no tiene el control de la administración, porque en la administración el control total lo tiene el socio privado.
Desde la EGEHID hasta la ETED y el tema APP
En los consejos
de EGE-Haina y EGE-Itabo, el Estado tiene un representante, con voz y voto. En
esas dos empresas, el modelo de APP (alianzas público-privadas) ha funcionado,
si se parte de los resultados, medidos por ingresos económicos que tiene el
Estado. En las generadoras donde el Estado no tiene acciones, de alguna manera
existe también APP, si se toma en cuenta que existen entre las partes contratos
para compra-venta de energía. La energía que el Estado contrata a las
generadoras se vende luego a los usuarios a través de Edesur, Edeeste y
Edenorte. En el caso de la ETED, es una empresa que llega a todo el territorio
nacional. Su responsabilidad es conducir y transportar la energía que despachan
los generadores; tiene que llegar a todas las subestaciones instaladas en la
geografía nacional, para poder llevar la energía. A partir del momento en que
la ETED transporta la energía que despachan los generadores, entonces Edesur,
Edenorte y Edeeste se encargan de la distribución y comercialización. Mientras,
la EGEHID administra 27 centrales hidroeléctricas, con una potencia instalada
de 624.5 megavatios de energía renovable. Genera aproximadamente 12 % de la
producción energética del Sistema Eléctrico Interconectado.
El Caribe