El ministro de Energía de Arabia Saudí opinó el domingo que
los principales productores de petróleo tienen que trabajar mejor para reducir
las oscilaciones mundiales de precios del crudo, que actualmente fluctúan entre
niveles por debajo de los 60 dólares por barril y por encima de los 86.
“Tenemos que esforzarnos más, y mientras más productores en
el mundo trabajen con nosotros, mejor podremos hacerlo”, dijo Khalid al-Falih.
“Creo que lo que tenemos que hacer es reducir el rango de la
volatilidad”, dijo al Foro Global de Energía del Consejo Atlántico en Abu Dabi.
Cuidándose de no establecer un rango de precios, advirtió
que hay consecuencias cuando los precios del crudo caen o suben demasiado.
El mes pasado, los países de la OPEP y otros productores
grandes acordaron reducir la producción por 1,2 millones de barriles diarios
para reducir el exceso mundial de suministro y estimular los precios en los
primeros seis meses de 2019.
Los productores están bajo presiones luego de una fuerte
caída de precios en meses recientes porque importantes productores _incluso
Estados Unidos_ están extrayendo crudo a tasas altas.
La semana pasada, Arabia Saudí anunció que tiene 268.500
millones de barriles de reservas probadas de crudo, un total de 2.200 millones
más alto que lo que se pensaba. El ministerio de Energía del reino elevó además
su cálculo de las reservas de gas por alrededor de 10%, a 325,1 billones de
pies cúbicos (92,07 billones de metros cúbicos) al final de 2017.
Las reservas de crudo del reino están entre las más baratas
de extraer en el mundo: alrededor de 4 dólares por barril.
El Nuevo Diario