EGE Haina pasa balance sobre sus 20 años de operación en el
mercado local. Una exitosa empresa público-privada presente en República
Dominicana desde los calientes tiempos en los que se impulsó la aún inconclusa
pero gran reforma del sector eléctrico dominicano.
Cuando sus accionistas privados representados por Haina
Invesment Co., LTD se aventuraron a invertir en el convulso sector eléctrico
dominicano, presentaron la propuesta ganadora que les comprometía con una
inversión de US$144.5 millones, adquiriendo el 50% del total de las acciones de
la nueva sociedad.
Del resto, quedó el 49.993% como propiedad de la
desaparecida Corporación Dominicana de Electricidad, hoy transformada en la
Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE). Eran
decisiones de inversión amparadas en la entonces reciente Ley de Reforma de la
Empresa Pública (No. 141-97, del 24 de junio de 1997), y en el marco de un
proceso de licitación pública internacional.
Con el tiempo, las acciones estatales pasaron al Fondo
Patrimonial de las Empresas Reformadas (FONPER), y manteniéndose el restante
0.007% de esas acciones como beneficios de los ex empleados de la desaparecida
CDEEE.
Era una época de olas interminables de apagones, de
inversiones en centrales eléctricas que por su eterna lentitud en entrar en
operación merecieron el nombre de “termonunca”, y de pérdidas en las líneas de
distribución y transmisión eléctricas que superaban el 50% de la generada.
Un sector eléctrico muy oscuro, muy contaminante (mucho
petróleo y mucho carbón), muy politizado, y con una ley que no era ley, porque
muchos de los actores actuaban como chivos sin ley.
Y en contrates, con ciudadanos muy desamparados para
defender sus derechos a recibir el servicio eléctrico y obligados a pagar
apagones.
Pero 20 años después, EGE Haina pasa balance sobre su
presencia y operaciones en República Dominicana. Y el contraste es impactante.
En la presente entrevista con Diario Libre, Luis Mejía
Brache, gerente general de EGE Haina, habla sobre evolución de dos décadas y de
las metas que la empresa espera lograr en los próximos 10 años.
En la entrevista estuvo acompañado de José Rodríguez, director
de Desarrollo; y de Ginny Taulé, directora de Relaciones Públicas y
Comunicaciones, que participan con notas aclaratorias.
P. ¿Cómo evalúa los pasados 20 años y cuáles planes futuros
tienen?
R. La idea es simplemente tres cosas. Lo que ha sido la historia
de EGE Haina en esos 20 años, brevemente, en qué estamos hoy. Y hacia donde
debemos ir en el futuro, en esa transición.
Nosotros que venimos ahora celebrando lo del 20 aniversario
de EGE Haina, hemos tenido que reflexionar sobre esa historia. Creo que se
divide en su naturaleza en dos décadas, en lo que fue la primera, que fue un
enfoque más en establecer una confianza en el sistema, en restablecer los
activos que recibimos del proceso de capitalización. Se hicieron ciertas
inversiones también. Duplicamos la capacidad existente.
Pero más que todo, era afianzar su operación en el sistema.
Porque eran plantas que salían con frecuencia, su disponibilidad estaba por el
suelo. Y como menciona ahí, la llevamos desde un 60%, que efectivamente estaba
disponible la máquina, a un 89% o 90%.
Lo que son las salidas forzadas, que es una métrica que
utilizamos mucho para ver cómo están las operaciones y mantenimientos de esas
máquinas y la confiabilidad de ellas en el sistema, bajó de un 10%, que son
salidas no planificadas, a menos de 3%. A la vez, en esos primeros dos años
hicimos dos cosas muy importantes, Barahona, uno de nuestros activos...
P. ¿Barahona es un sistema aislado?
R. Pedernales es sistema aislado. Barahona es una planta a
la que le llamaban la “termonunca”, cuando era parte de la CDE (Corporación
Dominicana de Electricidad). Era un proyecto que tenía, no se cuantos años, en
fase de conclusión. Y nunca se concluyó porque era algo que venía de la mano
con el Ingenio que está al lado, el Barahona. Pero se quedó ahí. Y nosotros,
los primeros dos años completamos ese proyecto y se convirtió a una planta
base.
Termonunca o Catalina
P. Con un poco más de mala suerte, fácilmente así hubiéramos
podido llamar a Punta Catalina.
R. Hubiera sido un caso. Pero gracias a Dios, en ese caso,
la terminaron.
Y no tan solo eso, la otra cosa importante fue que trajimos,
en los primeros dos años, la planta Sultana del Este, que en ese momento era la
planta sobre barcaza más grande en el mundo, con 150 megavatios. Y eso, vamos a
decir, más que duplicó, fueron 209 megavatios que en total agregamos a nuestra
capacidad.
Como te decía, esa primera década fue un tema de
confiabilidad, establecer los estándares de operación y mantenimiento, y de
volver a dar confianza en el sistema sobre las operaciones de EGE Haina.
P. En esa primera década, ¿cómo fue la relación con el
Gobierno? El sector eléctrico siempre ha sido conflictivo.
R. Fue un proceso obviamente de transición, porque fue nuevo
para todos los procesos de capitalización. Se une a que en esa primera década
también hubo ciertos factores exógenos, que causaron un poquito más de stress
por el tema del precio del petróleo, que les agregó stress a las finanzas del
sector. Y hubieron años, no vamos mentir, de crisis, porque los pagos se
retrasaban.
“El Gobierno tiene acciones en una empresa que ha invertido
750 millones de dólares, y durante ese tiempo también le ha retornado al Estado
más de 950 millones de dólares en impuestos y dividendos. O sea, que como sea
que tú lo veas, ha sido una alianza muy exitosa”.
P. ¿De cuáles años hablamos?
R. Estamos hablando de 1999 al 2009, en esa primera década
fue el inicio de la capitalización.
P. Y luego vino el desastre del 2003.
R. Exacto. En esa década, el desastre del 2003. El tema de
la re-estatización de las distribuidoras, por ese mismo desastre.
(José Rodríguez): Altos precios del petróleo y devaluación
del peso.
“Pudimos sobrevivir a la crisis”
P. Ahora que menciona las distribuidoras, los inversionistas
extranjeros se fueron, demandaron al país. Ustedes se quedaron. ¿Qué marcó la
diferencia?
R. En el caso de las generadoras, aunque hubo stress por los
retrasos en los pagos, creo que la diferencia la marcó el que al final se les
pagó. Y pudimos sobrevivir. Dentro de la crisis, pero se sobrevivió.
Lo de las distribuidoras fue la mezcla de muchos factores,
en su contra. Pero que concluyeron en que no eran auto sostenibles, en el
sentido de que no podían recuperar la energía que compraban, ya sea porque
tenían altas pérdidas, porque no pudieron actualizar las tarifas en su momento,
o por un tema de perseguir el fraude. Entonces, todos esos factores hacían que
ningún negocio pudiera sobrevivir en el tiempo. Y ahí se tomó la decisión,
porque no eran auto suficientes, de que el Gobierno tenía que subsidiarlas. El
Gobierno se metió en el medio.
Pudieron haberse tomados otras medidas. No vamos a pasar a
cuestionar el pasado, pero eso fue lo que sucedió.
P. Y, sobre todo, reconociéndose en ese momento, y lo que
todavía persiste, que no se cumplía cabalmente con la Ley General de la
Electricidad.
R. Correcto.
P. Y que era el marco legal que tal vez debía darle
garantías a los inversionistas privados.
R. Por supuesto. Y ese es el tema pendiente en el sistema
eléctrico.
P. Pero ustedes son producto de esos sucesos. Y se han
afianzado, han podido sobrevivir.
R. Por supuesto. Y definitivamente se demuestra que la
privatización funciona. Y que funciona bien. Por eso digo que el tema pendiente
que queda es qué vamos a hacer con las distribuidoras, que todavía tienen esas
altas pérdidas.
P. ¿Y ustedes ven perspectivas de mejoras en las
distribuidoras? Porque las distribuidoras son la caja del sistema. Sin embargo,
acumulan deudas que las tiene el Gobierno, el que también las tiene con
ustedes.
R. Por supuesto. Si, las distribuidoras son la entrada de
caja al sector. Y evidentemente, por esa causa de no tener la recuperación del
100% de la energía que se sirve, siempre vivimos con el tema de depender de
esos subsidios. Y esos subsidios vienen a veces a tiempo, a veces no a tiempo,
y hay retrasos. Hoy en día nos deben facturas desde abril.
P. ¿Cuánto les deben actualmente?
R. A nosotros nos deben 195 millones de dólares a la fecha
en total.
La deuda, “capital ocioso” que drena las inversiones
P. ¿Y cómo les afecta las operaciones de ustedes?
R. Esa es una situación que no nos conviene a nosotros. Ni
le conviene al sector. A nosotros, pues tenemos que tener un capital ocioso que
bien se pudiera destinar a más inversiones, si no tuviéramos que tener un
capital de trabajo tan extenso, de 6 meses, que no es normal en una industria.
Si no tuviéramos esa necesidad, nosotros, los generadores,
pudiéramos hacer más inversiones en el sector, más megavatios nuevos.
Y al sector tampoco le conviene, porque la vocación de los
generadores no incluye ser financista del sistema. Y eso también le pone un
stress a la caja del Gobierno.
P. También, imagino que ahuyenta nuevas inversiones, porque
las reglas de juego no están claras.
R. Por supuesto. Cuando un inversionista nuevo viene al
sistema, y cuando mete la ecuación de la inversión, tiene que planificarse para
que adicional al capital para desarrollar la planta, tener un colchón de seis
meses de cobranzas, para cuando se le retrasen. Y eso disuade a la inversión o
te pone un sobre costo.
P. ¿A qué ustedes le atribuyen que las distribuidoras
siempre acumulen deudas?
R. A las pérdidas.
P. Y sobre el tema de la gestión, ¿tiene una opinión?
R. Creo que definitivamente hay que perseguir a la energía
perdida. Hay dos factores que causan esas pérdidas. Las técnicas y las no
técnicas.
Las técnicas se resuelven con inversiones, que han venido
haciendo, pero que se tienen que hacer más.
P. Se ven nuevos préstamos multilaterales para mejorar las
redes, para que las distribuidoras inviertan, pero siempre sigue habiendo
pérdidas. Parece que es lo de nunca acabar.
R. Ha mejorado algo, pero todavía hay mucho por hacer.
Las pérdidas que nunca acaban
P. ¿Cuál es la pérdida actualmente?
R. Como un 30%.
“La demanda se duplica de aquí al 2040. Si hoy tenemos 17
gigavatios hora/años, en 2040 será de casi 40 gigavatios horas”
P. ¿Cuánto era antes?
R. 40%, viene de los 40 y pico. Sigue habiendo mucho por
hacer.
P. Ustedes van a cumplir 20 años en el país. ¿Cómo evalúan
tras esos 20 años, el proceso de capitalización en general?
P. Ahí te iba con la segunda década. La primera fue de
afianzamiento, y la segunda de un gran crecimiento y gran inversión. Invertimos
más de 725 millones de dólares. Más de 400 megavatios de capacidad instalada,
entre lo que es Quisqueya, que fue la planta que entró en 2013, y todo lo que
ha sido la energía renovable, siendo el primero y líder en el país y en el
Caribe.
P. ¿Eólica y solar?
R. Eólica y solar, tenemos hoy en día.
P. ¿También en gas natural?
R. Ahora también estamos haciendo una transición.
P. Ustedes dicen que no contamina.
R. Correcto. Y también mejora la eficiencia, porque en esa
última década nosotros hemos incrementado más de un 40% la capacidad de
producción de la empresa.
El balance es 950 millones de dólares invertidos desde el
principio. Arrancamos con 400 megavatios, de los cuáles 150 eran los que
estaban trabajando en el sistema. Hoy tenemos 1,000 megavatios de capacidad
instalada o en operación, en una matriz totalmente diversificada.
Lo que recibimos era todo fuel oíl. Ahora, carbón, fue oíl,
gas natural, y viento y sol.
Nosotros tenemos una visión sobre cómo debe ser el
crecimiento del futuro. Yo creo que ha sido el mejor ejemplo de una alianza
exitosa público-privada. EGE Haina lo piensa así, pero creo que nuestros
accionistas también lo comparten, lo han compartido públicamente.
El Gobierno tiene acciones en una empresa que ha invertido
750 millones de dólares, y durante ese tiempo también le ha retornado al Estado
más de 950 millones de dólares en impuestos y dividendos. O sea, que como sea
que tú lo veas, ha sido una alianza muy exitosa.
Un dato que salió recientemente, los de los bonos de
carbonos, que sé que debió haberlo visto. También es un hito importante de la
historia, porque Los Cocos, uno y dos, se convirtieron en los primeros parques
eólicos en recibir el crédito de carbono.
José A. Rodríguez: Primero que nada es un hito de orgullo,
porque fuimos los primeros como central energética en generar créditos de
carbonos. Nos pone como país hacia el aporte de conseguir los índices de
sostenibilidad marcadas por las naciones unidas, y definitivamente hacia el
futuro enfocarnos más en la generación de esos créditos de carbonos, porque
estamos enfocados hacia la energía sostenible.
Diario Libre: Los bonos de carbono, o lo que es lo mismo,
“créditos de carbono”, son un mecanismo internacional de descontaminación para
reducir las emisiones contaminantes al medio ambiente; es uno de los tres
mecanismos propuestos en el Protocolo de Kioto para la reducción de emisiones
causantes del calentamiento global o efecto invernadero. Cada crédito equivale
a una tonelada de dióxido de carbono que ha sido dejada de emitir a la
atmósfera.)
Luis R. Mejía: El año pasado hicimos un ejercicio de
planificación estratégica, sobre hacia donde debe ir el futuro. Y obviamente,
tú no puedes definir el futuro de una empresa, sin antes definir el futuro del
mercado en el que opera. Entonces, ¿hacia dónde va la República Dominicana?
Contratamos los servicios de la empresa consultora en energía, el número uno en
el mundo, McKinsey & Company, que nos hizo un estudio sobre cuál es la
proyección de la demanda en la República Dominicana, considerando el
crecimiento de la población, de la economía. Y concluyeron que la demanda se
duplica de aquí al 2040. Si hoy tenemos 17 Gigavatios hora/años, en 2040 será
de casi 40 Gigavatios horas en 2040.
Uno dice, bueno, ¿qué vamos a hacer?, ¿De qué forma suplimos
esa energía? Y evidentemente uno de los temas que más nos preocupa es el tema
de la sostenibilidad. Y por eso nos embarcamos en esa trayectoria cuando
empezamos con el parque eólico.
Y el futuro lo vemos así, nosotros queremos seguir
invirtiendo en generación para acompañar ese crecimiento, y lo vemos muy de la
mano con lo que es energía sostenible, basado primero en renovable, como eje
central del crecimiento, por el potencial que tiene el país en lo que es
energía eólica, energía solar, y obviamente hay biomasa.
En hidro tenemos ciertas limitaciones, pero en esas tres hay
un gran potencial para desarrollar.
Y hoy en día, la energía renovable compite de tú a tú en
costo por kilovatio hora con la energía tradicional. Hoy compite y le gana, en
el futuro se proyecta que será todavía más la diferencia en costos.
Por lo tanto, buscando el mayor beneficio en costo para el
sistema, se cae de la mata que tiene que ser la energía renovable lo que empuje
el desarrollo del sistema. Pero la energía renovable depende mucho del clima. O
sea, el sol sale hoy, pero de repente estamos en una época lluviosa. A veces
hay más viento, a veces hace hay menos.
Y por tanto se tiene que acompañar ese crecimiento con energía
que tú puedas gestionar.
“Y el futuro lo vemos así, nosotros queremos seguir
invirtiendo en generación para acompañar ese crecimiento, y lo vemos muy de la
mano con lo que es energía sostenible, basado primero en renovable, como eje
central del crecimiento”
“La primera molécula de gas natural, en febrero”
P. Para eso ustedes apuestan al gas natural. El gobierno
apostó por el carbón, y además habla de bonos verdes por la planta a carbón. El
contraste llama la atención.
R. Creo que también tenemos que tomar en consideración el
momento de la Historia en que se tomaron las decisiones. Y mirando en
retrospectivas, tal vez hoy no tomarías la decisión del carbón. Tenemos la
ventaja del pasado. Pero definitivamente, si nos posiciones hoy, es evidente
que el gas natural es el futuro.
José A. Rodríguez: Y hemos recibido el apoyo del Gobierno
hacia eso.
Luis R. Mejía: Correcto. Porque lo que queremos lograr con
la conversión del Este, o lo que estamos logrando, no hubiese sido posible sin
el apoyo del Gobierno.
Ginny Taulé: No podemos olvidar que el Gobierno es 50% EGE
Haina. O sea, el Gobierno está invirtiendo a través de EGE-Haina en energía
renovable y de gas natural.
José A. Rodríguez: El Gobierno declaró una estrategia de
gasificación del Este, que creo que además de apoyar el gas natural, incluye
una matriz de diversificación.
Luis R. Mejía: De hecho, estamos hoy en día, como fruto de
esas negociaciones y conversaciones, en casi en un 80% de logros en la
conversión a gas de la Central Quisqueya.
P. ¿Era a base de carbón?
R. No, era de HFO. De construcción, su combustible principal
es el gas natural. Pero además puede quemar HFO como respaldo. Así es que está
diseñada. Como hasta la fecha no había acceso al gas natural en esa zona, pues
estábamos quemando HFO. Es perfectamente capaz de hacerlo.
El tema siempre fue la falta de apoyo del sector público en
esa estrategia de gasificación, porque para llevar gas a la zona hay que hacer
unas inversiones pesadas en gaseoductos, en tanques, contratos con largo plazo
con los suplidores de gas.
P. ¿Podemos decir que ya hay apoyo?
R. Ya hay apoyo, ciento por ciento. Eso es correcto. Y fruto
de eso, estamos en un 80% en el logro de esa conversión. Nosotros pensamos que
vamos a tener la primera molécula de gas natural en febrero, ya en el parque
Quisqueya. Y que se termina antes del primer semestre del año, y estarán
operando esas unidades a tiempo completo.
P. Sobre Punta Catalina se recuerda que el Gobierno optó por
el carbón, alegando que no había acceso al gas natural. Ahora, ¿ese riesgo no
existe?
R. Por eso te decía que hay que tomar las decisiones en el
contexto en que se tomaron. Es una realidad del mercado que las condiciones del
mercado del gas son mucho más flexibles que lo que eran hace 8 años atrás. ¿Por
qué?, porque ha habido una revolución en Estados Unidos en la producción de gas
natural, mediante la perforación direccional, para lograr mayores reservas de
gas. Y Estados Unidos, que era un importador neto, se ha convertido ahora en un
tremendo exportador.
Entonces, la disponibilidad de gas ha incrementado. Al
incrementar la oferta, tiende a suceder como en todo mercado, que las
condiciones se flexibilizan. Y por tanto, los requerimientos que antes te
ponían para tu contratar gas. Como, por ejemplo, en el caso de Quisqueya, a 10
años. Antes tu tenías que hacer contratos a 20 años, en lo que te obligabas a
consumir el 100% de ese gas, pase lo que pase.
Hoy en día podemos conseguir contratos de menor plazo, con
garantías financieras mucho mayor, con mayor flexibilidad. Yo no mino un año,
pero si el año que viene no lo necesito, puedo cancelarlo.
Inversiones en 1,000 MW más en energía renovable, en
próximos 10 años
P. ¿Cuánto han invertido ustedes en energía renovable?
R. Llevamos 455 millones de dólares. Son 177 megavatios, a
la fecha. Tenemos muchos planes de seguir invirtiendo. De hecho, el resultado
de ese ejercicio que mencionamos, de McKinsey & Company, sobre el
crecimiento, es invertir y desarrollar mil megavatios en los próximos diez años
en energía renovable y en gas natural.
P. ¿Esas inversiones suplirían la demanda proyectada por
McKinsey & Company?
R. Con eso nosotros estamos estimando un 30% de lo que
requiere el país, porque realmente hay otros actores, nosotros no vamos a hacer
toda la inversión.
P. ¿Cuál es el crecimiento anual de la demanda energía?
R. Ese duplicarse en 20 años se traduce como entre 3.8% a 4%
cada año. Obviamente hay años con más crecimiento por temas particulares,
cíclicos. Este año, por ejemplo, ha sido anómalo, porque hubo un 10% de
crecimiento. Un consumidor que antes producía y ahora está demandando del
sistema, son factores. Pero en promedio, 4%.
R. ¿Y en cantidad de megavatios?
R. Si hoy en día la demanda es de 2,500, el 4% es 100 mega.
Ginny Taulé: Además de los mil megavatios en renovables,
vienen 400 en gas natural. Son 1,400 megavatios en los próximos 10 años.
P. Viéndolo en perspectiva, ¿cuáles barreras estructurales
persisten todavía en el sector eléctrico?
R. Lo hablamos antes. El principal tema es la sostenibilidad
financiera del sistema, que depende de las distribuidoras y su capacidad de
cobrar la energía que compra.
Van a tener un alivio importante, es una realidad. El año
que viene, por la conversión a gas y la entrada de Punta Catalina, van a
reducir el precio de compra de la energía para las distribuidoras. Y si ellos
mantienen la tarifa eléctrica igual, al reducir el precio de compra tienen más
flexibilidad.
Pero eso no resuelve el tema. El tema se resuelve atacando
las pérdidas definitivamente, para hacerlo sostenible en el largo plazo.
Porque luego viene el incremento de la demanda y se le va
esa ventana. Mejor dicho, tienen una perfecta ventana de oportunidad para
invertir en la reducción de las pérdidas durante los próximos 4 años.
“Nuestra visión es de apoyar a Haití, particularmente con el
tema de la energía, que es un recurso crítico para el desarrollo de cualquier
población. El deseo de hacerlo siempre ha estado. El reto de Haití es cómo tu
logras la estabilidad jurídica”.
El MEN: una nueva institucionalidad
P. Hay un cambio institucional en el sector, cuándo ya por
fin se empoderó al Ministerio de Energía y Minas como el rector del sistema
energético del país. No sé si ya está dando resultado, es demasiado pronto.
Pero antes era un sector fragmentado, la CDEEE, por un lado, las distribuidoras
por otro, y que no se articulaban muy bien. Ahora se supone que hay una
institución que planifica y que actúa como rector. ¿Ha tenido algún efecto?
R. Sin dudas ha tenido un efecto positivo, porque lo vemos
en la planificación en las nuevas adicciones al sistema, hemos vistos ciertas
mejoras. Pero todavía no se ha implementado al ciento por ciento, eso es una
realidad. Porque todavía la integración que se pactó en el Pacto Eléctrico no
se ha implementado al ciento por ciento. Sigue existiendo la CDEEE.
P. Ni siquiera se ha firmado el Pacto Eléctrico.
R. Correcto. Pero se pudo haber ejecutado como quiera. Sigue
estando el Ministerio de Energía y Minas...
P. ¿Qué lo ha impedido?
Yo diría que eso es un tema de decisión política, de que se
implemente., porque la forma ya está escrita en el Pacto.
P. El MEN ha estado impulsando exploraciones sobre gas
natural en territorio dominicano. ¿Ustedes tienen expectativas sobre esas
exploraciones? Porque eso podría abaratar costos.
R. Sin dudas reconozco algo, por lo que públicamente se ha
anunciado sobre el tema de buscar inversionistas para las exploraciones de
recursos de hidrocarburos. Pero la realidad es que nuestro negocio es la generación.
Realmente no tenemos el experticio para poderte decir que vemos futuro, o que
no vemos futuro, es probable, no es probable. Yo creo que eso tendremos que
verlo en el tiempo. Cómo reaccionan los participantes que se dedican a eso, ver
si realmente hay potencial. Si lo hubiese y se desarrolla, pues evidentemente
no tener que importar combustibles, debería bajar costos. Pero hasta ahí llegan
nuestros conocimientos sobre ese proceso.
P. Hablamos de los proyectos de EGE Haina en el país,
República Dominicana. Pero hay otro país en la isla. ¿Ven en Haití un mercado
potencial para ustedes?
R. Definitivamente, la repuesta es sí. Pero con la
condicionante de que Haití tiene sus complejidades. Nuestra visión es de apoyar
a Haití, particularmente con el tema de la energía, que es un recurso crítico
para el desarrollo de cualquier población.
El deseo de hacerlo siempre ha estado. El reto de Haití es
cómo tu logras la estabilidad jurídica, hacer las inversiones que se requieren
y poder cobrar, y recuperar las inversiones que se van a hacer.
Pero es un mercado que sin dudas algunas necesita el
desarrollo eléctrico.
P. ¿Ustedes tienen la puerta abierta si se presenta la
posibilidad?
R. Si. De hecho, hay un proceso público, porque ellos están
corriendo la voz para ver si privatizan ciertas partes, ciertas micro regiones,
y ahora estamos mirando. Pero todavía es muy temprano como para decirte que hay
una oportunidad. Pero seguimos como tu dijiste muy bien: que estamos abiertos a
explorar, si están las condiciones correctas, en ayudar y apoyar el desarrollo.
Pero estamos en un inicio muy exploratorio.
Pero hay otro tema que queremos hacer también, y no tan solo
Haití. Nosotros vemos en el futuro no muy lejano una EGE-Haina que invierte
fuera de República Dominicana.
R. ¿Pero salen fuera de República Dominicana? Porque no hay
es posibilidad por vía marítima de enviar electricidad
R. José A. Rodríguez: Técnicamente sí. Pero eso conlleva
complejidades políticas, legales.
Luis R. Mejía: Existen.
José A. Rodríguez: Aquí en República Dominicana hay un cable
submarino en Samaná. En Trinidad y Tobago hay uno. Técnicamente se puede. Pero
exportar por cable submarino hacia otros países tiene complejidades.
Luis R. Mejía: Pero si te digo que vemos un futuro en el que
este modelo exitoso lo podamos exportar hacia otros países.
Responsabilidad social
EGE Haina cree mucho en la contribución, particularmente en
los entornos cercanos a las centrales y a los sitios donde desplegamos
recursos. Porque no queremos solamente hacer inversiones en megavatios.
Hemos invertidos alrededor de 12 millones de dólares,
dedicado a eso, con un enfoque bien claro y preciso en educación, en deporte,
en infraestructuras comunitarias y en contribuir en la generación de ingresos,
en las zonas de influencias de las plantas de nosotros.
Nosotros tratamos de contratar lo más que se pueda en las
zonas locales.
Diario Libre