martes, 10 de diciembre de 2019

Principales productores de petróleo consideran más recortes



La OPEP y Rusia están en vías de aumentar los recortes en los suministros en 500,000 barriles por día conforme los mayores productores de petróleo del mundo intentan estimular el aletargado mercado del crudo.

Alexander Novak, ministro de energía de Rusia, dijo el jueves en la reunión de la OPEP en Viena que los ministros habían recomendado que los productores aumentaran los actuales recortes de producción de 1.2 millones de barriles por día (b/d) a 1.7 millones de b/d.

Las reducciones, que aún deben acordarse formalmente por la OPEP y otras naciones, entre ellas Rusia, durarían al menos hasta marzo de 2020, cuando expire el acuerdo actual de 1.2 millones de b/d.

Las crecientes esperanzas de un recorte contribuyeron a impulsar el precio del petróleo el jueves. El crudo Brent, la referencia internacional, ganó casi un 5 por ciento hasta alcanzar US$63.50 por barril en las últimas dos sesiones.

La medida se produce después de que los analistas advirtieron que el mercado del crudo podría sufrir un enorme exceso de oferta en la primera mitad del próximo año, conforme la guerra comercial entre EEUU y China socava la economía mundial.

También se produce conforme el Príncipe Abdulaziz bin Salmán, el nuevo ministro de energía saudita, intenta imponer su autoridad en el grupo y ejerce presión para fomentar una mayor obediencia entre los productores.

Comerciantes y analistas han advertido que la estrategia de Arabia Saudita no parece diseñada para elevar mucho los precios, sino que el cartel intenta tranquilizar el mercado en lugar de tener mayores ambiciones, como elevar el precio a US$70 u US$80 por barril.

Arabia Saudita ya había estado produciendo mucho menos que su objetivo de producción antes del ataque a algunas de sus principales instalaciones petroleras en septiembre.

Los analistas en la reunión advierten que el recorte finalmente anunciado tal vez no elimine muchos más barriles del mercado, dado que Arabia Saudita ya ha reducido la producción desde su aumento poco después de recuperarse de los ataques.

Bill Farren-Price de RS Energy dijo que el anuncio de una mayor reducción de los suministros le daría un “impulso psicológico” al mercado petrolero.

El crudo Brent se cotizó cerca de US$60 por barril durante gran parte de 2019, cifra más baja que su nivel promedio del año pasado, pero sin llegar a los niveles mínimos observados en 2015 y 2016. En aquellos años, el crudo cayó por debajo de los US$40, lo que provocó extensas dificultades para los países productores de petróleo.

Amrita Sen de Energy Aspects dijo que la OPEP y sus aliados, particularmente Rusia que se ha asociado con el grupo desde 2016, no quieren ayudar — con precios más altos — a la industria del esquisto estadounidense la cual ha comenzado a dar señales de desaceleración después de años de crecimiento vertiginoso. La llamada alianza OPEP+ tiene el objetivo actual de reducir la producción en aproximadamente un 1.2 por ciento del suministro mundial. Un recorte adicional de 500,000 b/d podría llevar esa cifra a aproximadamente 1.7 por ciento.

Ann-Louise Hittle, de Wood Mackenzie, dijo que, sin embargo, existía el riesgo de que el mercado pudiera descontar los efectos completos de las reducciones si están basadas en una mayor conformidad por parte de países como Nigeria e Irak, los cuales suelen producir más que sus objetivos.

El jueves, las acciones de Saudi Aramco, la compañía petrolera estatal, se cotizaron antes de la esperada salida a bolsa de la compañía, recaudando US$25.6 mil millones. Eso hace que el acuerdo sea la mayor oferta pública inicial del mundo, lo cual le da a la compañía una valoración de US$1.7 billones. Un mayor precio del petróleo ayudaría a respaldar las acciones en los primeros días de negociación.

Tres analistas informados sobre las discusiones que sostuvo la OPEP el jueves dijeron que sospechaban que el grupo podría anunciar un recorte aún mayor, quizás de hasta 800,000 barriles por día.

La especulación sobre esta estrategia — que se ha denominado “la sorpresa saudita” — ha tomado impulso. Bob McNally de Rapidan Energy Group, un ex asesor de la Casa Blanca sobre política energética, dijo que había una “alta probabilidad” de que hubiera un recorte más profundo.

Diario Libre – The Financial Times