El Gobierno no ofrece aún explicaciones del por qué
suspendió ayer la firma del Pacto Nacional para la Reforma del Sector
Eléctrico.
Esta mañana El Nacional trató de obtener la versión oficial
de la suspensión pero al cierre de esta edición no se había ofrecido ninguna
declaración.
Por WhatsApp se le envió mensaje al vocero de la
Presidencia, Roberto Rodríguez Marchena; al consutor jurídico, Flavio Darío
Espinal, y al ministro administrativo de la Presidencia José Ramón Peralta,
pero ninguno de ellos respondió el mensaje.
“El Nacional está interesado en saber por qué no se firmó el
Pacto Eléctrico”, fue el mensaje que se remitió a los funcionarios.
La firma estaba prevista para este miércoles a las 11:00
mañana en el Palacio Nacional.
Mientras que después del mediodía de ayer el Partido
Revolucionario Moderno (PRM) comunicó que no asistiría al acto de firma y
condicionó su participación al cumplimiento de 10 sugerencias.
Un Apunte
El PRM
Algunos atribuyen a la posición del PRM de condicionar, a
última hora, su firma en el pacto a que el Gobierno levantara eso como
argumento para dejar sobre la mesa su firma.
Sin embargo, otros observadores, aseguran que desde el Poder
Ejecutivo no había la voluntad necesaria para la firma, ya que el PRM es sólo
uno de los actores en el proceso.
Con la firma del Pacto se concluiría con un proceso de
diálogo que fue convocado por el presidente Danilo Medina a través del decreto
389-14 del 13 de octubre de 2014, el cual se prolongó hasta el 2017, cuando
terminaron los debates.
El acto de firma lo encabezaría el presidente Danilo Medina
y fueron convocados representantes de la sociedad civil, los partidos
políticos, organizaciones empresariales y social.
El proceso de diálogo lo coordinó el Consejo Económico y
Social, representado por monseñor Agripino Núñez Collado y se llevó a cabo en
las instalaciones de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra
(PUCMM).
Se caracterizó por los constantes impasses entre los
convocados que en ocasiones amenazaban con retirarse.
El pacto propone que sobre la base de los acuerdos y en un
plazo no mayor a seis meses, desde la firma, el Gobierno, teniendo como punto
focal la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE),
formule y disponga de un Plan Integral de Desarrollo del Sector Eléctrico
2015-2030.
Ese plan debía tener de manera clara las políticas y
acciones pactadas en procura de lograr un desarrollo integral y sostenible.
Entre los puntos que plantea el PRM están “que se respete la
Ley General de Electricidad y se derogue cualquier decreto o disposición que la
viole”.
También que se establezcan programas de licitaciones para la
contratación de energía con transparencia y eliminar contratos grado a grado.
El pacto está contemplado como un compromiso de la
Estrategia Nacional de Desarrollo (END), y es considerado un paso histórico de
gran avance para la solución del problema eléctrico nacional, pero a la vez un
gran reto, a juicio de los principales ejecutivos del empresariado agrupados en
el Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), y otras entidades de la
sociedad civil que participaron en su discusión.
El Nacional